sábado, 17 de diciembre de 2011

Everybody hurts sometimes.

La vida es luchar para salir a flote y mantenerte en la superficie.

Hasta ahí bien. Todo claro. ¿Es fácil? ¿Es difícil? Eso depende de cada persona. Simplemente es.

El problema empieza cuando compartes tu vida con otra persona. O cuando otra persona se convierte en tu vida.

Lo lógico es aprender a nadar a la vez, no solo al lado. Pero eso siempre, siempre -¡s-i-e-m-p-r-e!- resulta complicado.

En el momento en el que unes tu vida a la de alguien, debes hacer ciertos cambios. Lo que antes era una lucha por tu supervivencia se convierte en una lucha por vuestra supervivencia. Ya no tienes que salir a flote con tus problemas, sino que cargas también con las de tu compañero de viaje. Y lo peor es que por mucho que te esfuerces, al final acabarás golpeándole al intentar impulsarte -impulsaros- hacia arriba. Porque todo el mundo hace daño a los demás aunque no lo quiera. Pero si ese "los demás" es un "alguien" que está tan cerca de ti es más fácil chocar, y herir.

Pero no todo es tan negro. Es más, creo que todo es verde en ese sentido. Verde esperanza.

Un "nosotros" siempre es mejor que un "yo". Tener que llevar sobre tus hombros el peso de tus problemas y de los de otra persona también implica que pesarán la mitad, porque habrá alguien con quien compartir el esfuerzo. Y, sobre todo, con cada golpe que recibas, con cada golpe que des, estarás más cerca de alcanzar la sincronía con esa persona, de llegar juntos a la superficie y de olvidar que alguna vez estuvisteis en el fondo.

4 comentarios:

  1. Me ha gustado tu entrada :)

    ResponderEliminar
  2. La inmensa dualidad del amor y sus relaciones, a veces, por lo menos a mi, hacen que me cuestione seriamente si realmente la esperanza se pierde en último lugar. Sin embargo, en el momento en que aun no se ha apagado dicha luz verde, creo que es cuestión de seguir el rumbo que te marque; porque suele ser un buen faro de Alejandría. Hasta que se apaga. Es entonces cuando aprendes a navegar a oscuras por el aburrido caminito de la soledad.
    PD: perdón por la parrafada, me ha "dao" el "venaso".

    ResponderEliminar
  3. ¿Sabes? Con esta entrada me has convencido para que me quede por aquí :) Creo que es una muy buena reflexión, y tienes toda la razón del mundo en ella. Siempre será mejor un nosotros para poder enfrentarlo todo en compañía.
    ¡Besos!
    P.D.: Te sigo por Twitter también (:

    ResponderEliminar